Introducción

La práctica del montañismo es una actividad que, aunque apasionante, no está libre de riesgos. Las lesiones pueden ocurrir en cualquier momento, incluso cuando se toman las medidas de seguridad adecuadas. Es por eso que es esencial saber cómo hacer una evaluación rápida de lesiones en la montaña. En este artículo, analizaremos cómo podemos reconocer y evaluar lesiones comunes en la montaña, con el fin de tomar decisiones bien informadas y rápidas que puedan salvar vidas.

Preparación para una evaluación de lesiones

Antes de salir de casa, es importante asegurarse de tener el equipo adecuado y estar familiarizado con los procedimientos de primeros auxilios. Incluso si no eres un experto en la materia, aprender las técnicas básicas de primeros auxilios como la respiración boca a boca, la reanimación cardiopulmonar y cómo controlar la hemorragia puede ser la diferencia entre salvar o no una vida en el futuro.

Equipo adecuado para llevar a una excursión en la montaña:

• Bolsa de primeros auxilios: contrólala regularmente para asegurarte de que está bien equipada, muestra signos de desgaste y agotamiento y reemplaza cualquier artículo necesario.
• Celular: para comunicarte con los servicios de emergencia y buscar ayuda cercana.
• Manta de emergencia: que pueden emplearse para mantener a alguien caliente y seco. También puede ayudar a prevenir la hipotermia.
• Cortaplumas: que pueden usarse para cortar ropa si se necesita para tratar una lesión o un vendaje.
• Tijeras: para cortar las vendas.
• Vendas adhesivas: una medida temporal para cerrar heridas y prevenir la infección. Vienen en diferentes tamaños y se pueden cortar a medida que se necesiten.
• Parches para ampollas: para proteger las ampollas si se producen durante la caminata.
• Analgésicos: son antiinflamatorios no esteroideos y analgésicos como el ibuprofeno, el acetaminofeno y la aspirina. Estos medicamentos pueden ayudar a aliviar el dolor y la inflamación.

Reconociendo lesiones comunes en la montaña

Para reconocer lesiones, es fundamental conocer su naturaleza y sus posibles causas. Algunas lesiones pueden ser el resultado directo del esfuerzo físico o de la falta de coordinación, mientras que otras pueden ser causadas por condiciones ambientales extremas o accidentes. Veamos las lesiones más comunes en la montaña.

Lesiones musculares y esqueléticas

Las lesiones musculares y esqueléticas son comunes en la montaña, especialmente en los excursionistas que llevan cargas pesadas. Estas lesiones pueden ocurrir debido a una sobrecarga, una caída, un mal movimiento o un cambio repentino en la dirección. Los síntomas de estas lesiones pueden incluir dolor, hinchazón, inflamación y dificultad para moverse o levantar objetos.

Lesiones por caídas

Las lesiones por caídas son relativamente comunes en la montaña, especialmente cuando se camina sobre terreno empinado o irregular. Las lesiones suelen ser fracturas, huesos rotos y lesiones en la cabeza o la columna vertebral. Los síntomas incluyen dolor intenso, hinchazón, deformidad y dificultad para moverse.

Lesiones por hipotermia

La hipotermia es una condición peligrosa que puede ocurrir en la montaña cuando el cuerpo pierde más calor del que produce. La hipotermia puede ser causada por el frío extremo, la humedad y una ropa inadecuada. Los síntomas incluyen temblores, mareos, confusión, habla incoherente y dificultad para caminar. En casos graves, la hipotermia puede ser fatal.

Lesiones por congelación

La congelación es otra condición causada por temperaturas extremadamente bajas. Los dedos, las manos, los pies y las orejas son las áreas más comúnmente afectadas. Los síntomas incluyen entumecimiento, enrojecimiento, hinchazón y ampollas.

Pasos para hacer una evaluación rápida de lesiones en la montaña

El primer paso para hacer una evaluación rápida de lesiones en la montaña es evaluar lo que ha sucedido. Esto requiere observar detenidamente el entorno y hacer preguntas para tener una idea clara de la situación. Si hay testigos, es importante hablar con ellos y obtener toda la información posible. Una vez que se ha hecho esta primera evaluación, se deben determinar las lesiones y cómo se están afectando a la persona herida. Si las lesiones son muy graves, es importante buscar ayuda lo antes posible. Si las lesiones no son graves y pueden ser manejadas in situ, entonces se deben tomar los siguientes pasos:

Paso 1: Evaluar la causa de la lesión

Es importante saber cómo ocurrió la lesión y qué la causó. Esto puede ayudarnos a determinar cuál es la mejor manera de tratar la lesión.

Paso 2: Evaluar la velocidad y la fuerza del impacto

Este paso es importante para comprender la gravedad de una lesión. Una lesión causada por un fuerte impacto a alta velocidad puede ser más grave que una lesión causada por una caída desde una altura menor.

Paso 3: Evaluar los síntomas de la lesión

Es importante determinar qué síntomas están presentes y cómo afectan a la persona herida. Algunos síntomas pueden ser muy graves e indicar una lesión más grave, mientras que otros síntomas pueden indicar lesiones menores o lesiones que no son peligrosas por sí mismas.

Paso 4: Evaluación del dolor

Evaluar el nivel de dolor que sufre la persona herida es fundamental para tratar adecuadamente la lesión. Se debe prestar atención al nivel de dolor y su ubicación, así como al tipo de dolor (punzante, agudo, constante, etc.)

Paso 5: Estabilización y Control de las lesiones

Una vez que se ha evaluado la lesión, es importante estabilizarla y controlarla para prevenir mayores daños. Esto debe incluir la recuperación de la persona herida y el transporte en un lugar seguro.

Conclusión

En resumen, saber cómo hacer una evaluación rápida de lesiones en la montaña es esencial para cualquier amante del montañismo y el senderismo. Al seguir estos pasos y estar preparado antes de salir de casa, podemos tomar medidas rápidas y bien informadas que podrían marcar la diferencia entre salvar o no una vida. Recuerda: si tienes alguna duda o no te sientes capacitado para administrar primeros auxilios, busca ayuda profesional inmediatamente.